TEMA ESPECIAL: CUARENTA Y DOS MESES

La frase “cuarenta y dos meses” está proféticamente característica para hablar de un periodo de persecución. El pisoteo del atrio del templo es un proverbio para el pueblo de Dios bajo el dominio de los incrédulos en diferentes períodos de la historia (Antíoco Epífanes, los romanos en el año 70 d.C y el Anticristo en los tiempos finales).

Cuarenta y dos meses, o su equivalente, es mencionado varias veces en la Biblia. El origen parece ser el libro de Daniel.

1. Daniel 7:25; 12:7 menciona “tiempo, y tiempos, y medio tiempo”; o sea, 1277 días (asumiendo un “tiempo” como equivalente a un año), ver Ap. 12:14.

2. Daniel 8:14 indica 2300 tardes y mañanas.

3. Daniel 12:11 señala 1290 días.

4. Daniel 12:12 establece 1335 días. Algunas frases similares se encuentran en Apocalipsis 12:6 (1260 días) y en el 13:5 (42 meses).

Otra manera de mirar esta enigmática frase es verlo como una secuencia: uno, dos, pero no un tercero; por lo tanto, una cantidad de tiempo divinamente limitada durante la cual reinos gentiles persiguen al pueblo de Dios. Dios, en el libro de Daniel, ¡está en completo control (ver, Daniel 7:4, 6, 11, 12, 18, 22, 25, 26, 27)!

Cuando se toman en cuenta todo lo anterior, la variedad parece hablarnos de la naturaleza simbólica de estos números (vea el Tema Especial: Números Simbólicos en las Escrituras), mientras que su proximidad a los cuarenta y dos meses parece demostrar que es un número simbólico para un período de persecución. Ya que tres y medio es la mitad de siete, parece ser que se refiere a un período completo de persecución que tuvo que ser acortado (Mateo 24:22; Marcos 13:20; Lucas 21:24). La persecución está limitada en el amor de Dios como así también el juicio.