TEMA ESPECIAL: PERFECCIONANDO A LOS SANTOS (de Ef. 4:12)

¡Los líderes son el regalo de Dios dado para entrenar al Cuerpo de Cristo para la obra del ministerio! La iglesia necesita volver a capturar el poder, los dones, y la tarea bíblica asignada para todos los miembros de la iglesia (clérigos, laicos, ancianos, jóvenes, hombre y mujeres, ver Jl. 2:28 citado en el sermón del Pentecostés por Pedro en Hechos 2). Cada cristiano es un ministro dotado y llamado de Dios de tiempo completo.

El término “perfeccionar” (equipar) significa que algo esté listo para su propósito asignado. Es usado para:

1. Extremidades quebradas que son sanadas y hechas útiles nuevamente.

2. Redes de pescadores rotas que son remendadas y por lo tanto, útiles para pescar otra vez.

3. Barcos equipados con cuerdas y velas y preparado para navegar en el mar.

4. Polluelos que habían crecido lo suficiente y estaban listos para ser vendidos en el mercado.

Observe también que la meta no es únicamente que algunos creyentes maduren, sino todos (ver Ef. 4:13). Para la palabra “santos” ver el Tema Especial: Santos.

Los dones son dados a cada creyente para el bien común (ver 1 Co. 12:7,11). Cada creyente es un ministro de tiempo completo llamado y dotado. No todos son ministros “vocacionales”, pero todos son siervos. La iglesia moderna esta incapacitada debido a que tiene:

1. Una mentalidad de laico/clérigo.

2. El concepto de la salvación como un resultado final; ¡¡¡en vez de entender que la salvación es el proceso basado en una relación y ésta para el servicio!!!

Para mí, uno de los mejores libros en cuanto al discipulado es el de Robert Coleman, The Master Plan of Discipleship.